Lo que os voy a contar hoy es algo que se me ocurrió por casualidad y me ha evitado lavar a mano.
El otro día mi Princesa Nubia salió del cole con la mochila llenita de mango, si, de mango, vamos que pringosa y pagajosa, además de con un color naranjoso sospechoso (menos mal que se le ocurrió guardar la ropa de gimnasia en el otro bolsillo...). Después de acordarme del "aperitive", del mango, y de jurarme a mi misma conmigo misma de que nunca más mango para almorzar, cogí un cepillo y me puse a frotar, no hubo manera, así que decidí meter la mochila de marras en la lavadora pero pensé que dentro de una bolsa de lavar iba a estar más protegida.
Mi bolsa no es tan mona..... pero sirve lo mismo |
Y en ese momento, mientras embutía la mochila dentro de la bolsa se me ocurrió que la bolsa en cuestión es genial para lavar las gomas, gomitas, diademas y demás complementos del maletín de Txiki A.
En lo que a mi respecta SE ACABÓ EL FROTAR!!!!!!!!!
SI es que... no hay como ser una madre apañada!!!!!
ResponderEliminarOtra buena idea a la saca.